How can I find a way to make you see I love you
Words don't come easy
Words don't come easy to me
This is the only way for me to say I love you
Words don't come easy
Hola, soy Zola,
zoleta para la mi jota, y ahora mismo parezco un perrifantasma.
El pasado
día 25 tras el maravilloso paseo matutino y a principio de la tarde me puse muy
malita: a morir, vamos, por eso hice lo que los perros mestizos de bien hacían
en el campo: alejarse lo más lejos posible para morir. Eso lo aprendió la mi jota mientras vivimos en
la aldea Asturiana.
Decía que
ahora soy un fantasma porque el día 25 de Octubre comencé a vomitar y corrí a
esconderme en el rincón más alejadamente insólito de la vivienda ya que campo
no había disponible. Ella me buscó y me
convenció para que fuera con ella, pero ya no podía moverme, ni siquiera para
hacer pis, pos, ni nada. Me trajo mi
cunita, me colocó encima como pudo, pues peso 28 kg. y a lo largo del día la regué de orines y demás lindezas.
Aquella
noche la pasó a mi lado, no durmió pero enchufó musiquita dulce para
tranquilizarnos. Así estuve hasta el día siguiente en que vino su hijo y con su
ayuda pudieron subirme al coche para llevarme hasta la veterinaria amiga de él que consiguió dormirme para
siempre. Ella siempre a mi lado, calladita y acariciando mi cabeza hasta que exhalé el último aliento.
Quedo agradecida a
todos ellos, porque lo cierto es que en aquellas condiciones tan patéticas estaba
muy harta de seguir viviendo. Solo ella me preocupaba, puesto que vivíamos la
una para la otra, comprendiendo mejor que bien nuestros límites en aumento.
Cuando
volvió a casa, ya entrada la noche, sencillamente cayó rendida y yo velé su sueño
para que estuviera tranquila. Al día
siguiente se concentró en limpiar como una loca para no pensar en nada, pero
aunque no me veía, porque no es clarividente, me sentía a su lado y mentalmente
me decía que me fuera a mi mundo perruno, que siguiera siendo feliz, que
siempre sería la parte más linda e íntima de su existencia. La pobre no podía
evitar lo sollozos cada vez que limpiaba mis rincones favoritos, que eran
muchos. Me tenía que ir evaporando de aquel mundo emocional nuestro.
Así, poco a
poco me fui diluyendo, por eso mismo escribo las que serán mis últimas líneas en este
blog. En el pasado escribí tantas como
para llenar un libro, todas guardadas a buen recaudo y evaporadas del
blog. Escribo esto porque mis viejos
amigos saben muy bien a qué me refiero pero los nuevos no entenderán ni torta.
Así que
nada mas por mi parte, aunque me consta que ella no pararía de escribir, que es
lo que le priva, ya lo irá haciendo, al tiempo. De momento sigue limpia que te
limpia, que mucho me temo que le guste tanto como escribir. Mientras tanto la esperaré desde mi mundo
perruno, afortunadamente ya nos va quedando menos. Guau, el tiempo no existirá pero estar juntas
ha sido un sueño precioso de 14 años menos 1 mes.